Preguntas frecuentes
No solo de los huesos. Analiza todas las estructuras del cuerpo. La conexión entre los diferentes tejidos, órganos y sistemas del cuerpo es fundamental para entender que todo problema funcional de la salud produce un cambio en la estructura. Y cualquier modificación traumática de la estructura produce alteraciones funcionales en la salud.
La osteopatía no parte del análisis local, por especialidades, sino que el análisis es siempre global, buscando la causa probable de la aparición de la sintomatología. Entendemos el síntoma como una señal de alerta que no hay que suprimir sin encontrar previamente la causa del mismo. Además, cada persona recibe un tratamiento distinto aunque presente la misma dolencia que otra.
Existen muy pocos casos en los que esté contraindicada y éstos se limitan a enfermedades graves en sus periodos de evolución aguda y a traumatismos recientes. En ambos, la osteopatía podrá estar perfectamente indicada más tarde, cuando la fase crítica haya pasado y se haya aplicado el tratamiento específico necesario.
Es aconsejable acudir con ropa cómoda y sin joyas o complementos, para evitar roturas, incomodidades o extravíos. También es recomendable tomar antes una ducha o baño caliente.
La zona a tratar debe estar descubierta, pero el resto de tu cuerpo estará siempre cubierto.
Depende de cada persona y problema pero, si no se padece una lesión crónica, lo habitual es necesitar unas 3-4 sesiones.
Depende de cada persona y problema, pero lo habitual es que sean cada 3-4 semanas aproximadamente, para permitir que el cuerpo asimile los estímulos que ha recibido durante el tratamiento.
Debes avisarme cuanto antes para permitirme reprogramar la agenda. Si no te presentas -sin haber avisado- y deseas volver a la consulta, deberás hacer frente al coste total de la visita concertada inicialmente.
Casi siempre molesta un poco, pero la mayoría de personas lo describen como un tipo de dolor “positivo” o “reparador”.
Durante las 48 horas posteriores al tratamiento puede que sientas cansancio o notes que el dolor ha cambiado de lugar o se incrementa. Después llegará una agradable sensación de mejoría.
Si no dispones de un diagnóstico concreto o la medicina convencional no da respuesta a tus dolencias, te recomiendo que consideres probar la osteopatía. Para reequilibrar los sistemas estructural, visceral y craneal revisaré todo tu cuerpo y es muy probable que encuentre respuestas nuevas porque aunque el dolor se exprese en un punto puede tener su causa a distancia.
La osteopatía es una alternativa especialmente eficaz con los trastornos crónicos y en la mayoría de las personas se puede compatibilizar con el tratamiento médico sin problemas. En cualquier caso, la valoración experta de un osteópata no excluye los exámenes y análisis médicos convencionales previos.
Todas las radiografías, ecografías, TAC, RM, informes, etc. de los que dispongas serán muy útiles para perfilar el diagnóstico y conocer mejor tu estado de salud.